“Cantar con Mokuanes conlleva una responsabilidad con el público”

De la nueva camada de Mokuanes, Jilmer Suazo Molina es, quizá, el más activo en las redes sociales, anunciando a su público los días y lugares donde estarán cantando o agradeciéndoles el cariño recibido.

De conversación amena, siempre accesible y amigable, Jilmer recuerda que su afición por el canto inició cuando tenía 14 años de edad, una edad en la que su música favorita era el reggaetón y que cantaba junto con sus amigos del barrio, particularmente con Otoniel Escoto, quien le inspiró a cantar un año más tarde música de Maná.

Originario de la pintoresca ciudad La Trinidad, un pequeño pueblo humilde ubicado antes de llegar a Estelí, Jilmer tuvo la oportunidad de ser integrante del reconocido grupo Los Paisanos, que es manejada por su papá Jilmer Pastor Suazo. Aquí pasó 10 años formándose y afinándose antes de dar el salto a Los Mokuanes.

Para ese entonces, Los Mokuanes ya era un grupo que se escuchaba a nivel nacional con canciones de gratos recuerdos como Nunca olvidaré, Tu perdón, Mokuanes de Cavanga, entre otros. Al desplazarse sus miembros originales para crear otro grupo musical, Jilmer tuvo la oportunidad de hacer casting para ser parte de la nueva camada.

Han pasado cinco años y Jilmer sigue sonando fuerte y cantando a todo pulmón porque, asegura, ha sido la primera vez que entra a una agrupación “con mucha exigencia” y reconoce que “el miedo” que sintió fue porque valoró que por Mokuanes “han pasado cantantes de calidad”, aunque tuvo la confianza de pertenecer al mismo por el talento que posee.

Fue en Mokuanes donde terminó de formarse profesionalmente en canto y además desarrolló bien la habilidad de bailar. Además, ser parte de los vocalistas junto con Albert y Robert  le ha valido conocer varios países donde han sido recibidos afectuosamente.

El amargo precio de la fama

Curiosamente, Mokuanes mantiene una agenda muy apretada tanto dentro como fuera del territorio nicaragüense, teniendo programadas presentaciones en Honduras y próximamente estarán en Estados Unidos y España, donde ya han dejado huellas en esos escenarios.

Y aunque suene fantástico viajar y disfrutar de su trabajo, Jilmer confiesa que lamenta no compartir fechas importantes con su familia y sus amigos, “principalmente en celebraciones como Navidad, Año Nuevo, Día de las Madres” u otra fecha importante porque, considera, es el precio que paga el ser artista.

El camino apenas inicia para este chavalo de veintitantos años de edad, quien no descarta lanzarse al ruedo de cantar como solista, pero que por el momento no lo intenta “porque en nuestro país no tenemos el apoyo necesario para sobresalir como solista”.

Mientras tanto, Jilmer seguirá dándose todo en los escenarios para alcanzar el reconocimiento como cantante y prepararse para el futuro, en el que desea “tratar de ser una mejor persona, conocer más lugares del mundo, formar una familia estable, tener sus hijos y ser un mejor amigo, hermano y ser humano”.

Para seguir los pasos de Jilmer, pueden hacerlo a través de las cuentas de Facebook e Instagram. En Facebook lo puede encontrar como Jilmer Suazo y en Instagram como JilmerJilmer.