La Unión Europea (UE) está contribuyendo con la educación y la nutrición de 302 mil niñas y niños de 46 municipios del Corredor Seco y de las zonas afectadas por los huracanes Eta e Iota en Nicaragua, al aportar recursos para garantizar la merienda en sus escuelas.
La contribución que brinda la UE a la merienda escolar, a través del Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas (WFP por sus siglas en inglés), alcanza los 8 millones de euros (unos 9 millones 393 mil dólares).
Con estos aportes, 182 mil niñas y niños de preescolar, primaria y educación a distancia en el campo de Jinotega y de la Región Autónoma de la Costa Caribe Norte (RACCN) tienen garantizada la alimentación en sus escuelas como parte de la Merienda Escolar Regular.
Comida calientita en sus escuelas
Adicionalmente, 120 mil niñas y niños de 31 municipios del Corredor Seco reciben un segundo plato de comida caliente en sus escuelas como parte del refuerzo de la merienda escolar que aporta el Programa “Promoviendo la resiliencia climática y la seguridad alimentaria de hogares rurales en el Corredor Seco”, financiado por la UE e implementado por WFP durante el período 2020-2024.
Durante una reunión de trabajo, el Embajador de la Unión Europea en Nicaragua, Pelayo Castro y la Representante de WFP, Giorgia Testolín, valoraron el impacto de los programas de resiliencia climática y seguridad alimentaria que impulsan conjuntamente en las zonas más vulnerables del país. Garantizar la merienda en las escuelas es fundamental para incrementar los niveles de asistencia a clase y la capacidad de aprendizaje.
Arroz, frijoles, aceite vegetal, super cereal y maíz (y/o harina de trigo), algunos de estos producidos localmente, se transportan en camiones hacia las escuelas del Ministerio de Educación (MINED).
“La Unión Europea y WFP tienen una larga experiencia de trabajo conjunto a favor de la seguridad alimentaria y nutricional de los hogares más vulnerables del país. Garantizar la merienda escolar de las niñas y niños y la sostenibilidad de los pequeños productores y productoras es clave durante los períodos críticos de escasez de alimentos y sequía, previo a la siembra y cosecha”, expresó el Embajador Pelayo Castro.
Apoyo incluye cocinas mejoradas
El proyecto en el Corredor Seco también incluye la construcción de cocinas mejoradas para la preparación de los alimentos y sistemas de agua para que las comunidades educativas cuenten con agua segura.
“Siempre recibimos con mucha alegría las contribuciones de la Unión Europea para la merienda escolar y el apoyo a pequeños agricultores”, expresó Testolín al finalizar el encuentro con el Embajador Castro. “La merienda escolar es un programa fundamental para atender las necesidades de las niñas y los niños de las zonas más vulnerables, porque su seguridad alimentaria también es afectada por los fenómenos que provoca el cambio climático, como sequías recurrentes y huracanes cada vez más potentes”, agregó.
El aporte total de la Unión Europea para los programas de resiliencia climática y seguridad alimentaria implementados por WFP, es de 30 millones de euros.
Las actividades también benefician a unos 7 mil 500 pequeños y medianos productores y productoras agrícolas de Estelí, Madriz, Nueva Segovia, Matagalpa y Jinotega. Esta contribución está dirigida a promover la resiliencia ante fenómenos naturales, construcción de obras de agua, conservación de suelos, agricultura sostenible, buenas prácticas nutricionales, insumos agrícolas, créditos y asistencia técnica en diferentes áreas.
